Muerte de Sebastião Salgado: un fotógrafo "humilde", "testigo de lo mejor y de lo peor", que logró "abolir lo superfluo", según Nikos Aliagas

Sebastião Salgado es descrito como "el gran maestro" del que es "difícil hablar en imperfecto", según Nikos Aliagas, tras el fallecimiento del artista franco-brasileño a los 81 años. El periodista tenía previsto estar junto a Sebastião Salgado para dirigir un debate en un festival el viernes.

Nikos Aliagas, que reconoce estar "muy triste", dice también que le inspiró "su humildad, su rigor, su personalidad, su mirada" . Para el presentador, el poder de las imágenes del fotógrafo fallecido "radica en su capacidad de abolir lo superfluo, la postura, la puesta en escena, para quedarse sólo con lo esencial, la humanidad".

Para el periodista, Sebastião Salgado logró "mostrar las tragedias del mundo, las angustias del mundo, sin convertirse en un voyeur, sin dar lecciones". El franco-brasileño, cuya humildad era "real" , fue "testigo de nuestros tiempos, de los mejores, así como de los peores" .

Las imágenes de Sebastião Salgado "eran tan poderosas" que el periodista habló de un "espejo sistemático colocado sobre nuestra conciencia y nuestro futuro". Esa era la fuerza de Salgado: poner al individuo en su justa medida y, al mismo tiempo, dar sacralidad a la existencia de las almas en este magnífico mundo que, a pesar de todo, sigue siendo la Tierra.

Para el presentador, Sebastião Salgado “supo tocar el absurdo de la condición humana sin perder nunca su ternura, su luz y su esperanza”.